Habló el Comandante Presidente

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Venezuela
del 22 al 28 de enero 2010

Habló el Comandante Presidente
Maglene Sierraalta

Escuchar al Comandante Presidente Hugo Chávez hablar de las familias inquilinas fué realmente un alivio. ¡Al fin se rompió el silencio! Tenemos esperanzas de solución, ante esta histórica deuda social, que se tiene con casi un millón de venezolanos quienes hemos sido arrinconados hacia el alquiler como una alternativa para suplir el derecho a la vivienda digna y adecuada.
Nos aclara nuestro Comandante que Juan Barreto se equivocó en el proyecto de expropiaciones de edificios, habitados por familias inquilinas de 20, 30, 40, 50 años y más viviendo y conservando los mismos, porque su dueño o dueña los abandonan bajo la excusa de que los alquileres son bajos, a pesar de que en algunos casos cobran más de lo regulado.
Edificios de los cuales lo único que desean es desalojar, a pesar de haber sido pagadas sus hipotecas con los cánones de arrendamiento. Aceptamos la equivocación de Juan; así mismo que haya sido falta de articulación y coordinación con los entes gubernamentales.
No obstante, podemos considerarnos excluidos. Nosotros en nuestro desespero, confiamos en la revolución bolivariana que nos lanzó una tabla de salvación ante los inminentes desalojos.
Un político me aseveró: “Es que no podemos enfrentar a Chávez al poderío económico inmobiliario” ¿Por qué nó? Si lo hemos enfrentado al Imperio y a la canalla, y de todos ha salido bien.
Ahora tenemos que escuchar desprecios en frases como: “Ustedes han sido burlados por la revolución bonita”. “El Alcalde está en los últimos estertores”. “Les vamos a ofrecer en venta los apartamentos”. “Tienen una gran oportunidad de ser propietarios de esa vivienda que han ocupado durante 40 años como inquilinos”. Pregunté: ¿Cuánto quieren? “390 mil hoy; en junio será el doble”. Respondí: Esos apartamentos no valen más de 180 mil. Por supuesto, imaginen la reacción.
No es fácil solucionarlo. El problema inquilinario es amplio; su nivel es nacional. Debe existir coordinación gubernamental y voluntad política revolucionaria social. A nuestro correo electrónico llegan cualquier cantidad de problemas de todo el país.
Los aspavientos mediáticos de Apiur y sus peticiones de fideicomiso para los propietarios, la criminalización de los inquilinos, el deseo de protagonismo electorero, el escaso carácter social demostrado por la diputada Laura Valls y su proyecto de Ley de Arrendamientos Inmobiliario han sido la tortura de los últimos cuatro años.
Comandante Presidente: ¡usted tiene razón!. Despues de pagar durante 35 años una vivienda, es de justicia ser propietario de la misma. Al pobre que nada tiene le quedan sólo las esperanzas; y esa esperanza es Usted.